Bertrand Tavernier filmó esta robusta y hermosa historia de perdedores que cuenta las andanzas del Ejército de Salónica en las postrimerías de la Gran Guerra. La película fue reconocida con los premios César de la Academia del Cine de Francia al mejor director y al mejor actor, un inconmensurable Philippe Torreton. Dicho sea de paso, de Torreton cabe decir, en honor de todo el plantel, que a pesar de su clase magistral interpretación, le cuesta destacar de entre el conjunto coral de interpretaciones conmovedoras y veraces, que son la base de esta extraordinaria película. El film está basado en la novela ganadora del Premio Goncourt de 1.934, Capitaine Conan escrita por Roger Vercel. La historia se sitúa en los Balcanes, en la larga cuenca del Danubio, en Bulgaria para ser precisos. Cuenta las andanzas de un pelotón de asedio formado por un conjunto de presidarios al mando del teniente Conan, al que veremos ascender a Capitán a lo largo de la película, que buscan su lugar en el cielo infiltrándose entre las líneas enemigas con la consigna de no hacer prisioneros. Un grupo irregular, sin uniformes, sucio, armado hasta los dientes, sediento de sangre, que practica una guerra irregular y sin reglas, pero que, en palabras de Conan, son la clase de hombres que "gana las guerras". Seguramente eso es cierto, pero también son la clase de personas con los que acaba la paz. Terminada la guerra, firmado el armisticio, la noticia de la desmovilización no llega, o parece no llegar, al frente oriental y el pelotón liderado de manera carismática por Conan persevera en sus actos de violencia y rapiña.

La máquina de matar que es el pelotón de Conan, un instrumento extraordinario y exitoso en la guerra, no puede, ni sabe, parar. Entonces empiezan los Consejos de Guerra y las condenas a aquellos que con sus acciones de avanzadilla y limpieza, arriesgadas y heroicas, hicieron posible la victoria. El teniente Norbert es el encargado de defender y en cierto modo de comprender, a estos hombres, que poco o nada importan ya a sus mandos, para los que en el mejor de los casos constituyen una permanente molestia. Los Consejos de Guerra, los movimientos absurdos de tropas, el amor en el frente, la lealtad, la amistad, el compañerismo y, finalmente, la herida incurable de la derrota en la victoria, del abandono, la falta de reconocimiento y el olvido al que están abocados toda este grupo humano, son la materia de la que está hecho el film. El grupo de Conan encuentra una última oportunidad en una batalla oscura contra los bolcheviques. Muchos mueren. Sus nombres no aparecerán en ninguna conmemoración, ningún monumento: desaparecerán sin grandeza. Fin. En pocas películas se muestra el horror y la locura de la guerra como en ésta. En pocas también la necesidad colectiva de olvidar y dar la espalda a las personas, los hechos y las razones de la victoria. Al final, un Conan convertido en una sombra, acosado por un cáncer en estado terminal, es visitado por Norbert, el teniente que le dio réplica y hasta cierto punto cobertura en sus correrías búlgares. Ese encuentro es un enorme momento de cine, una escena imborrable que resulta innecesario comentar.

En este recurso enlazamos una Crítica de “Capitán Conan” por Ignacio Pulido. Recomendamos utilizarla después de ver y analizar la película.

Imagen del cartel vía: www.filmaffinity.com. Dejamos a continuación un trailer y la ficha técnica de la película.

Ficha Técnica de la película (www.filmaffinity.com)

Título original: Capitaine Conan

Año: 1996

Duración: 129 min.

País:  Francia

Director: Bertrand Tavernier

Guión: Jean Cosmos & Bertrand Tavernier (Novela: Roger Vercel)

Música: Oswald D'Andrea

Fotografía: Alain Cloquart

Reparto: Philippe Torreton, Samuel Le Bihan, Bernard Le Coq, Catherine Rich, François Berleand, Claude Rich, Christophe Calmel

Productora: Alain Sarde / Little Bear / TF1 Production

Género: Bélico. Drama | I Guerra Mundial

Sinopsis: En noviembre de 1918 se firma en París el armisticio que pone fin a la Primera Guerra Mundial. Sin embargo, la noticia de la desmovilización no llega al frente oriental, donde una fracción del ejército francés sigue actuando a las órdenes del expeditivo Capitán Conan.